EL PARO Y SUS FRACASOS

09062015BS

CARTA ABIERTA DE LA REVISTA “CONCLUSIONES”:

“En el país que se está construyendo, no tienen lugar y saltan al vacío social”

En la “Conferencia de Prensa” de los que organizaron el «paro» -realmente sólo de transporte- de hoy, ensuciaron una vez más la historia de la lucha sindical por los derechos de los trabajador@s.

Realmente son unos «artistas» de reparto de la oligarquía y el imperialismo. No tienen ningún prurito en mentir, desfigurar la realidad como tergiversar los hechos de la historia. Comparar el “Cordobazo», al compañero Saúl Ubaldini, etcétera, con lo que ellos hacen es un asesinato de la verdad histórica manchando la sangre de quienes dieron incluso la vida por el progreso del país, de la clase que produce las riquezas del país: la clase trabajadora. Estos falsos y riquísimos económicamente se codean con el poder fáctico de los que desde las empresas privadas quieren destruir al Estado Nacional y estos 12 años de progresos sostenidos en el nivel de vida de los 40 millones de argentinos, esto en una acción contrarrevolucionaria de cara al progreso social, a la que estos seudo dirigentes en un rejunte de burocracia pigmea mentalmente (con perdón de los verdaderos pigmeos) se ofrecen-seguramente no gratuitamente en sus servicios desestabilizadores como el “accidente” del tren de hace dos días-, para INTENTAR compensar la debacle política y electoral de la derecha política-social en Argentina.

Pero también expresan que la burocracia sindical, la corrupción y la corpo económica tienen patas cortas. Su función de “bisagras” para representar de alguna manera a los trabajadores está llegando al límite que no les permite justificar su existencia en un país donde el curso Nacional, Popular y Democráticamente revolucionario avanza en la construcción de una nueva sociedad. Ellos olfatean que en lo que se está construyendo NO TIENEN LUGAR por eso SALTAN AL VACÍO SOCIAL Y terminarán ESTRELLÁNDOSE EN EL PISO DE LA CONDENA PÚBLICA POR LA INMENSA MAYORÍA QUE HOY NO PARARON SINO QUE SE VIERON OBLIGADOS A NO PODER TRABAJAR Y PRODUCIR.

Es indignante ver a éstos que alguna vez hicieron el MTA, la Marcha Federal, etcétera, que hoy se hayan puesto al servicio de los que, -además inevitablemente-, solo los ven a ellos finalmente como piezas descartables de la lucha por el poder y de clases en lo que hace a las corporaciones trasnacionales y nacionales del poder económico corporativo.

Este fracaso de estas burocracias, con distintas categorías, no significa que los sindicatos, la central obrera única no sean una necesidad del y para el progreso del país. Por el contrario, muestra la necesidad urgente de reconstruir el papel y la función de los sindicatos como instrumentos de la clase trabajadora. La verdadera democracia sindical se asienta en la defensa de la unidad de la clase obrera. Lo otro es el espejismo de construir aparatos que en nombre de la democracia sindical, terminan destruyendo esa unidad. Por eso una democracia sindical auténtica no implica muchos sindicatos por gremio o una plétora de centrales sindicales. Porque eso finalmente sólo contribuye a la disgregación de las luchas sindicales y al mejor posicionamiento del sistema capitalista y la burocracia sindical. La disputa de ideas y propuestas debe ser en función de centralizar el organismo y ampliar su base democrática. De ahí que este “paro” fracasado es el de la concepción de las “muchas centrales” y no de la clase obrera en su conjunto. Esto expresa la necesidad de discutir desde el campo de la lucha de clases un programa para que éste sea armonizado con el progreso alcanzado, y ese programa ya existe en la historia concreta del movimiento obrero argentino. Los Programa de Huerta Grande y La Falda, los 27 puntos de la CGT de Ubaldini son precursores en su estructura de lo que hoy nace y se desarrolla como el Gobierno Nacional, Popular y Democrático. Sin ellos, sin los verdaderos paros generales de la CGT de los últimos 50 años, sin la Marcha Federal, sin los piqueteros que eran los trabajadores sin puestos de trabajo por la crisis del capitalismo, sin la acción combinada político-sindical que terminó con el gobierno genuflexo de De La Rúa y su combo neoliberal, sin todo ello no habríamos podido llegar al luminoso porvenir actual.

La independencia de la clase trabajadora en su organismo sindical y Centrales Únicas de Trabajadores de los partidos y gobiernos no significa estar contra ellos, sino que, como instrumento reivindicativo de la clase trabajadora, de la fuerza del trabajo ante el capital empresarial, juegan el rol de ser la parte que compensa la etapa desigual y combinada del curso de transición en que ha ingresado América Latina, y en particular Argentina pero también Bolivia, Venezuela, Brasil, Ecuador, Chile, Nicaragua etc.

Es en este camino en pleno desarrollo en una Luminosa América Latina, y en un mundo con el BRICS y la nueva economía mundial antisistema, en curso de progreso de los pueblos en Grecia particularmente, pero también en España, Portugal, Islandia y Rusia de base soviética, que el fracaso del paro de este segmento de la burocracias sindicales aliadas a las corporaciones que contó con el apoyo de una desteñida seudo izquierda que juega su partido en la cancha minúscula de intereses particulares perdiendo así su papel revolucionario para ser furgón de cola, como en 1945/46 de la oligarquía y el imperialismo, termina siendo un escalón más del progreso en la construcción de una nueva sociedad.

Nada queda de este “paro” para sus organizadores físicos intelectuales sino un fracaso enorme. Por el contrario en la inmensa mayoría de los 40 millones que constituimos el país nos impulsa a PROFUNDIZAR EL CURSO NACIONAL, POPULAR Y REVOLUCIONARIO que comenzó el 25 de Mayo de 2003. ■

NI UN PASO ATRÁS, NO VOLVERAN, NO PASARÁN!!

León Cristalli, director de la revista Internacional “CONCLUSIONES” / 09-06-2015

 

Argentina: el curso del nacionalismo al estado revolucionario
Conclusiones para el progreso