(El presente documento ha sido editado como Editori@l Internacional en «Frente Obrero», órgano del Partido Obrero Revolucionario (leninista-trotskista-posadista). fundador e integrante del Frente Amplio, en Uruguay. La edición de Frente Obrero responde al número 1014, del 27/2/2020)

Al principio, el actual virus El 2019-nCoV, también llamado “novavirus”, el problema del contagio viral parecía una menudencia en la relación humana con la naturaleza, y se reducía a una región de China Popular, producto de atrasadas relaciones con la naturaleza. Es necesario recordar lo que la IV Internacional (leninista-trotskista-posadista) escribió y  publicó el 2 de febrero 2020, ampliamente por el sistema Internet /Facebook.

Sostuvimos  “Estos crímenes del sistema capitalista provienen del atraso que trae una sociedad de clases donde un minoritario (1%+19%=20%) explota la fuerza de trabajo y la vida misma de la otra parte, la  que es absolutamente mayoritaria con el 80 %, que conduce  no solo la explotación del ser humano, sino de la naturaleza en forma indiscriminada. Los consumidores de idiotas creencias no están en países de origen, sino, como el consumo de drogas, estupefacientes, etcétera, se produce donde se concentra el gran capital, las burguesías y oligarquías que desprecian la vida y hacen del “gourmet” una condición de distingo social.

La Revolución Popular china, basada y apoyada originalmente en una base campesina que venía en una historia de vida de ver cada año morir de hambre y enfermedades a millones de personas, ha mal heredado tradiciones que se generaron en las desigualdades, basadas en las «conocidas hambrunas de cada año y durante siglos en China, como también en la India»: no por casualidad, sino por causalidad al atraso en el desarrollo de las fuerzas productivas. La Revolución China triunfante desde 1949 superó esa hambruna pero a contra marcha del desarrollo de la economía, se mantiene algún grado de atraso cultural.

La revolución China, (1935/45) de entonces, contra el Kuomintang, un curso naciente de la burguesía nacionalista de derecha con el Gral. Chiang Kai-shek que, a contramarcha de Mao y el Partido Comunista Chino, como Kuomintang, trataba de retrasar y derrotar al pueblo revolucionario chino, dividiéndolo con un Gobierno paralelo.  Derrotado militar y socialmente Chiang Kai-shek huye y se refugia en la isla de Taiwán – antes “Formosa”, protegido económica y militarmente por el imperialismo y el sistema capitalista mundial.  El Partido Comunista Chino crea lo que se denominó “nueva gran marcha con Mao Zedong a la cabeza, que en su progreso político con la “política de masas”, rompió con la alianza con el Kuomintang sostenida en gran parte por la URSS.

Este curso, muy combinado en China, produjo desigualdades enormes, incluida la añeja y milenaria aristocracia de los “mandarines”, etcétera. Desarrollándose condiciones que permitieron también contradicciones culturales en la “gran Marcha”, o en la parte liberada de China, manteniendo atrasos ancestrales producto y herencia de las hambrunas, y – en nuestra opinión -, combinadamente, por ausencia de un desarrollo industrial de la China de aquel entonces.

Atraso después compensando por el progreso social revolucionario que concentradamente se expresaba en la milenaria ciencia médica, y en la cultura – que aun de elites- significaban las artes. 

Las Comunas Chinas fueron verdaderas ciudades que se autoabastecían y desarrollaban procesos de industrialización en base a un enorme esfuerzo social, combinando el campesinado pobre, el medio y las Fuerzas Armadas Chinas, junto al PCCH. Fue un hermoso intento de superación del atraso industrial con la perseverancia y abnegación social del pueblo chino, que no se agotó y es base del progreso de China Popular en la historia.

Hoy este mismo curso se está volviendo a desenvolver en condiciones de desarrollo económico de China que colocan a la nación en la primera economía del mundo.  De China Popular depende una parte importante del funcionamiento del sistema capitalista empresarial imperialista, asociado a este gigante productivo. Un curso que la dirección de China, el PCCH, las FFAA, revalúan permanentemente, como lo expresa XI Jinping.

El virus “novavirus”, tanto como el atraso cultural en la alimentación y creencias de poderes de los animales etcétera, que consume una reducida parte de la población, es parte de contradicciones que subsisten en razón de  lo desigual y combinado del origen de la revolución China. Por vínculos, relaciones de clases intermedias, una alta burocracia de 40 millones de “nuevos ricos”, aliados al sistema capitalista mundial en lo económico, controlados por el Gobierno Chino, las FFAA, y el PCCH que no le permiten transformarse en una nueva clase con poder de decisión.  

Es en este camino en que se va a superar el desnivel de una sociedad que une a los “ricos, lo más atrasados culturalmente”, que tienen sus veleidades anticientíficas de creencias que solo destruyen lo que debería ser una natural relación del ser humano con la naturaleza.

Por esta razón, el Gobierno Chino de Xi Jinping, ha resuelto por ley el cierre de todas estas cavernas del atraso que comercializan antinaturalmente alimentación humana. Una contradicción que – como ahora con el “novovirus” -muestra lo peligroso, asesino a la especie humana, frente a lo mejor que ha dado la revolución china en sus 70 años de existencia: el pueblo chino y el Gobierno de China Popular.  LC fundación.j.posadas@gmail.com . “

Hoy, el desarrollo desigual y muy combinado de las relación entre el Estado Chino dirigido por el PCCH y el mundo capitalista, ha saltado de un punto regional de China, – ya altamente controlado y en vías de extensión por las medidas sociales socialistas que ha tomado la dirección China -, a desenvolverse en el caldo de cultivo altamente expuesto del sistema capitalista mundial.  Como sociedad basada en el interés individual y la concentración financiera del sistema capitalista imperialista, se ve enfrentada a una crisis sanitaria o Pandemia, de posible extensión no controlada de pérdida de vidas. El individualismo feroz de una sociedad basada en la política imperialista del mercado, hesita en su capacidad de responder unánime y centralizadamente, como si lo hizo el Estado Obrero sui generis Chino, bajo la dirección del Partido Comunista.

Es precisamente aquí donde esta nueva condición expresa claramente lo frágil del funcionamiento de una sociedad dividida en clases. De los enormes huecos que deja en la vida social el sistema capitalista porque lo que resuelve el “mercado” es Ley absoluta dentro del neoliberalismo imperialista. No decide la inteligencia social, sino muy limitadamente porque es ahogada cuando en su expresión y hace difícil saltar por  encima del cerco de la propiedad privada como eje del funcionamiento de la sociedad.

La nueva condición creada alrededor del novavirus/19, produce una condición particular, ciertamente. Lo es porque más allá de que la ciencia médica logre controlar y llevar por medios combinados científicos y sociales al camino de una simple “gripe de nuevo tipo”, plantea una crisis existencial del género humano en razón de la enorme debilidad con que el sistema de propiedad privada de los medios de producción pueda responder a la crisis.  Todo acentuado, en esta etapa del capitalismo imperialista financiero trasnacional, en que no cuenta, por su naturaleza, con las armas lógicas de una sociedad de iguales. Por eso reacciona individualmente, lo que es para el novavirus/19 la más cómoda forma de expandirse.

Veamos lo que se propone como discusión político científica a esta situación:

“La ciencia abierta acelera la respuesta no imperialista”, como analiza Fernando González Candelas, catedrático de Genética, responsable de la Unidad Mixta de Investigación “Infección y Salud Pública” FISABIO-Universitat de València I2SysBio. CIBER Epidemiología y Salud Pública, Universitat de València:

Por último, menciono un aspecto que quizá haya pasado inadvertido para los lectores: el empeño de científicos e investigadores por obtener, compartir, analizar y comunicar los resultados relativos a la nueva infección de forma casi inmediata. Esta “ciencia abierta” permite la toma rápida de decisiones informadas, el desarrollo de kits de diagnóstico rápido, junto a encontrar el origen del virus tanto en su punto inicial, el mercado de pescado de Wuhan, como en su expansión a otras poblaciones.

1. Posadas: “Científicos y revolucionarios logran tener la objetividad que solo la da la lucha por el socialismo”.

¡Ojo! porque mucha de la ciencia en la que se basará el descubrimiento y desarrollo de una vacuna, o un tratamiento eficaz para la infección, es la misma que a duras penas consigue financiación para avanzar en el conocimiento de este virus, también de otros virus, cuando no acecha una epidemia.

El jefe de la misión de la Organización Mundial de la Salud en China Popular afirma que el mundo «no está preparado» para hacer frente a la epidemia del coronavirus. Bruce Aylward declaró que el éxito de China para detener la propagación del covid-19 provocó en otras naciones una «falsa sensación de seguridad«.  

«China sabe cómo mantener con vida a las personas infectadas […] Esto no será así en todas las partes del mundo […] Es una enfermedad grave«, indicó Aylward, quien acaba de regresar del gigante asiático. «¿Cuántos países planean camas de hospital, planean ventiladores […] y la capacidad de laboratorio para poder manejar esto? […] Tiene que haber un cambio de mentalidad. Hay que planear», declaró el experto. A pesar de que en el epicentro de la enfermedad, en China, el número de casos nuevos está disminuyendo, ha habido un aumento repentino en varias partes de Asia, Europa y Oriente Medio.”

Cerramos esta línea editori@l con estos argumentos que expresan científicos- J Posadas predijo acerca de su papel: “son los que junto a los revolucionarios del mundo logran tener la objetividad que solo la da la lucha por el socialismo”.

El sistema cruje, las bolsas mercantiles del mundo se caen, los Gobiernos del sistema hesitan, vacilan sobre qué medidas adoptar para impedir el ingreso del covid-19, etcétera.

Lo central, o esencial, pasa por la sociedad y la organización política que lo enfrente la crisis abierta. El sistema neoliberal capitalista, concentrado en el imperialismo financiero, no cuenta en su ADN, prever y solucionar socialmente las crisis, sino mediante lo que le produce ganancias.

Por esta razón, creemos que es desde este punto de partida, en que los pueblos del mundo lo van a resolver y algunos, como China Popular, Rusia de base soviética, ya lo están haciendo. Sin hesitación ni paranoia alguna,  son los sindicatos, los partidos revolucionarios, progresistas, nacionalistas antiimperialistas,  los que debemos encarar políticamente esta crisis, que siendo concreta y científicamente peligrosa,  también  abre la posibilidad de ganar etapas en la construcción de una Nueva Sociedad: el socialismo!  

Eliseo Ramírez

26 de febrero de 2020.